Un importante movimiento en el sector minero colombiano ha captado la atención internacional. El magnate turco Robert Yüksel Yildirim, conocido como el “Rey del Cromo” y fundador del grupo CoreX, está a punto de cerrar la adquisición de la mina de ferroníquel Cerro Matoso, ubicada en el departamento de Córdoba, por aproximadamente 130 millones de dólares.

La operación se realiza con la australiana South32, actual propietaria del yacimiento, que ha decidido enfocarse en cobre y zinc. La transacción contempla un pago inicial y hasta 100 millones adicionales, condicionados a resultados de producción y permisos de expansión. Está prevista su conclusión hacia fines de 2025, una vez cumplidos los requisitos regulatorios.

Cerro Matoso es uno de los yacimientos de ferroníquel más grandes del mundo, con una producción anual de más de 40.700 toneladas en 2024, y su concesión actual se extiende hasta 2044. Este activo es esencial para la fabricación de acero inoxidable y baterías para tecnologías limpias. La transacción encaja con la estrategia de expansión global de CoreX, que ya ha adquirido activos en países como Venezuela, Kosovo y Costa de Marfil.

Expertos, como el economista Luis González del BID, consideran este movimiento “una oportunidad para repensar el rol estratégico del sector minero en la transición energética del país”. Sin embargo, advierten que Chile necesita una política estatal clara para capitalizar plenamente su potencial.

En resumen, esta adquisición reafirma el interés internacional en los recursos minerales de Colombia e impulsa el debate sobre el desarrollo de políticas mineras que promuevan la sostenibilidad y la innovación tecnológica.